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Habia una vez una sandia bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivia en un dojo un poco feo pero su sensei era un negro tan simpatico que parecia un cirquero. La sandia loca bailo un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melon loco acavado de nacer. Despues se encontro a un tipo muy feo que traia una capa grande y amarilla. De su bolsa salio un increible saco de pulgas y aranias peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas.

Habia una vez una sandia bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivia en un dojo un poco feo pero su sensei era un negro tan simpatico que parecia un cirquero. La sandia loca bailo un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melon loco acavado de nacer. Despues se encontro a un tipo muy feo que traia una capa grande y amarilla. De su bolsa salio un increible saco de pulgas y aranias peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas pero ellas eran muy tontas y

Habia una vez una sandia bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivia en un dojo un poco feo pero su sensei era un negro tan simpatico que parecia un cirquero. La sandia loca bailo un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melon loco acavado de nacer. Despues se encontro a un tipo muy feo que traia una capa grande y amarilla. De su bolsa salio un increible saco de pulgas y aranias peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas pero ellas eran muy tontas y arrogantes asi que tubo ke escapar

Habia una vez una sandia bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivia en un dojo un poco feo pero su sensei era un negro tan simpatico que parecia un cirquero. La sandia loca bailo un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melon loco acavado de nacer. Despues se encontro a un tipo muy feo que traia una capa grande y amarilla. De su bolsa salio un increible saco de pulgas y aranias peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas pero ellas eran muy tontas y arrogantes asi que tubo ke escapar por un acantilado muy muy alto

Habia una vez una sandia bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivia en un dojo un poco feo pero su sensei era un negro tan simpatico que parecia un cirquero. La sandia loca bailo un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melon loco acavado de nacer. Despues se encontro a un tipo muy feo que traia una capa grande y amarilla. De su bolsa salio un increible saco de pulgas y aranias peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas pero ellas eran muy tontas y arrogantes asi que tubo ke escapar por un acantilado muy muy alto, se avento sin pensarlo dos veces

Había una vez una sandía bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivía en un doujo un poco feo, pero su sensei era un negro tan simpático que parecía un cirquero. La sandía loca bailó un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melón loco acabado de nacer. Después se encontró a un tipo muy feo que traía una capa grande y amarilla. De su bolsa salió un increíble saco de pulgas y arañas peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas, pero ellas eran muy tontas y arrogantes, así que tuvo que escapar por un acantilado muy, muy alto, se aventó sin pensarlo dos veces y cayó en un río chocolatoso

Había una vez una sandía bailarina que estaba loca como una cabra montesa del norte, la cual vivía en un doujo un poco feo, pero su sensei era un negro tan simpático que parecía un cirquero. La sandía loca bailó un tango horrible enfrente de el mismo negro como si fuera un melón loco acabado de nacer. Después se encontró a un tipo muy feo que traía una capa grande y amarilla. De su bolsa salió un increíble saco de pulgas y arañas peludas sin colmillos ni patas, pero ellas eran muy venenosas, pero ellas eran muy tontas y arrogantes, así que tuvo que escapar por un acantilado muy, muy alto, se aventó sin pensarlo dos veces y cayó en un río chocolatoso que lo arrastro al mar chocolatoso