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 Posted: Tue Sep 14, 2004 8:12 am
xd q ganas tnias d poner el dibujo d zellia eee serpi xd si esq mi keka t inspira blaugh
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Posted: Tue Sep 14, 2004 1:14 pm
Bueno debido a la respuesta de Lady Devne, tendré que postear mis historias aquí, aunke no siendo un genio o un artista dibujando como lo son Lady Serpentosia o Lady Devne, tratare de hacer mi mejor esfuerzo contando estas historia que hice... originalmente son historias para juegos RPG, que estoy haciendo, si alguien quiere algunos de estos RPG's cuando los acabe con mucho gusto los tendré a disposición de ustedes mis hermanos Damaecios.... de parte mia va la Introducción y Primer Capítulo... "Los sellos habían sido rotos.
Los jinetes cabalgaban.
Las antiguas razas se despertaron.
Las puertas del infierno estaban abiertas.
Los dos grandes hijos se preparaban.
El Apocalipsis había comenzado."
En el final de los tiempos conocidos, Ángeles y demonios bajaron a la tierra para la ultima batalla. La batalla en la que decidía todo. Dos titanes, rivales desde su nacimiento, lideraban los ejércitos. Se enfrentaron . . .
. . . y el mundo tal y como conocíamos fue devastado.
Después de la guerra, la magia volvió a fluir como en su día y criaturas de leyenda surcaban el mundo.
Unos siglos después, la vida total del planeta se había adaptado a esta mundo. Un mundo de magia y tecnología, un mundo de lealtad y traición, un mundo legendario e imposible, un mundo . . . Postapocaliptico." "INTRODUCCIÓN" En la cima de una colina, un misterioso hombre con capucha negra esperaba a su hermano. Ya era casi de noche y el sol se ponía en el horizonte cuando la sombra de una gran criatura cubrío la espalda del encapuchado.
-Hola, hermano. -Dijo aquel hombre girándose y encontrando otro encapuchado también vestido de negro.
El primer encapuchado abrazó al recién llegado con gran cariño. Éste le devolvió el abrazo sin demasiado énfasis
-Llegas tarde.-
-Es que tenia varias cosas que hacer.-
Ambos se quitaron las capuchas. El que esperaba era rubio y con ojos azules, con una expresión ruda pero amable mientras que el otro era un muchacho que aparentaba ser más joven de lo que era, con una melena de color negro brillante y unos ojos rojos que intimidaban.
- Hace doscientos años que no nos vemos. ¿Eh, hermano?- dijo mirando con sus ojos celestes a su pariente
- Si.- Hizo una pausa.- Desde la gran guerra.-
- Bien.- Meditó unos instantes. Hacía tanto tiempo que no se veían que no sabia que decir.- Me hace feliz que hayas decidido terminar con nuestra confrontación.-
- ¿Terminar?- respondío el hombre moreno mirándole con una sonrisa y una falsa cara de extrañeza.
- En tu carta decías que querías acabar con esta locura.-
- Exacto. Pero no como alianza, sino como victoria.- Sonrío enseñando unos dientes inhumanos.- ¿Te acuerdas de mi hijo?-
- ¿Noddegamra?- preguntó el hombre rubio con un tono de sorpresa.
- Si.- Empezó a pasearse.- Y quería que supieras que está en plena forma y que dentro de unos meses vendrá a esta tierra.-
- Pero, entonces ¿esto no va a tener fin?-
- ¡Por supuesto que no va a tener fin!- Replicó con odio.- Seremos hermanos de sangre, pero nuestros padres no son los mismos.- Le señaló temblando de ira.- Sólo tengo una motivación en mi vida... ¡Que es acabar con la tuya!.-
El hombre rubio inclinó la cabeza con tristeza. Mientras, el hombre moreno se acercaba al borde del precipicio con pasos cortos que resonaban en las paredes de roca mirando por encima del hombro a su hermano.
-Mi hijo no tardara en llegar, ¿acaso tienes tú algún héroe para impedirlo?.-
Nada mas terminar la frase se lanzó ladera abajo riéndose como un loco, haciendo que los pájaros salieran disparados huyendo de tan tenebroso sonido mientras una criatura descomunal voló a gran velocidad hacia el cielo y al frente. Esa risa recorrío miles de hectareas. Desde un joven recogedor de basuras en un vertedero olvidado de la mano de Dios, hasta un caballero melancolico en las profundidades de Alemania. Desde un elfo cronista buscando tecnología, hasta una mujer salvaje oculta en la naturaleza. Desde un Filo Cruzado que vaga independiente, hasta una Felina prostituta en los suburbios del antiguo París. Desde una androide que oculta su identidad bajo la piel, hasta un hombre que lucha por asecinar sus fantasmas.
Incluso llegando a una pequeña provincia en el sureste de Hispanot. Un joven semielfo extraordinariamente grande, se detuvo abandonando por un instante sus tareas sorprendido por el poder de esa maligna carcajada. Entonces, una pequeña niña de sus misma raza salió de una humilde casa.
- Ray, mama ya tiene preparada la cena. Hoy tenemos asado de ternera.- informó la pequeña haciendo que su hermano se agachara casi automáticamente para acariciarla.
- Esta bien, Erica. ¡Vamonos a jalar!- le respondió mientras, con un impulso, levantó a su hermana y la sentó sobre su hombro.-
El Semielfo era consciente de que tenía que descansar. Al fin y al cabo, al día siguiente tendría lugar su último examen y, si lo superaba, llegaría a ser por fín un Filo Cruzado. Bueno hermanos de Damaecia os dejo aquí lo que sería la Introducicón de esta primera historia, prometo si es que les gusta, seguir poniendo los demas capítulos, más o menos cada 4 o 5 días... GRACIAS por su tiempo y comprensión se aceptan cualquier tipo de críticas CONSTRUCTIVAS... reclamos y regaños tambien estan aceptados... ^^
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Posted: Wed Sep 15, 2004 8:05 am
Tiene buena pinta... está perfectamente escrito... tiene intriga, alcance territorial alto, descripción concisa y personajes definidos...
¡Quiero más! Me encanta. Le doy un 9.9. xp
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Posted: Wed Sep 15, 2004 10:24 am
jejejejejje sweatdrop ke bueno ke te haya gustado Raist... Gracias a tu entusiasmo, hoy dejo el 1er capítulo... pero como soy mexicano hoy se celebra el día de la Independencia de México... por lo tanto tengo "puente" escolar, por lo cual me ire de viaje a la playa y tendre que poner el 2do capítulo hasta el lunes o martes ^^... Gracias por tus comentarios y atención espero que te guste la historia...
CAPITULO - 1
NUEVOS MUNDOS
Las luces del alba se filtraron por la rejilla que hacía las veces de ventana, reduciendo los magníficos rayos de la luz del Sol, a unos meros trazos destellantes, que acariciaron con suavidad la cara de un semielfo recostado en una litera, con el rostro alegre y una gran sonrisa dibujada en los contornos de su joven cara.
Poco a poco, como disfrutando de cada momento del nuevo día, Ray abrió los ojos y miró alrededor. Se encontraba en el dormitorio de su casa, su amada casa, allí abajo dormían placidamente sus diez hermanas, con caritas de ángeles, frágiles y desprotegidas; pero allí estaba él, a punto de convertirse en un gran guerrero de la orden de los Filos Cruzados. Raúl Dragonstate jamás vería sufrir más a sus hermanas desde la muerte de su padre, no, de ningún modo, él las protegería, había sido entrenado para luchar, instruido en las más nobles causas regidas por un código del honor muy marcado, era su destino, toda su vida dedicada a alcanzar tal meta, no podía fallarles. Pero entonces recordó la risa diabólica y tan llena de odio que había percibido la noche anterior.
-Seria un sueño –se preguntaba para sus adentros –no lo oí claramente, eran risas, risas de un ser tremendamente malvado, pero mi hermana no lo escuchó, ni nadie en mi casa, acaso solo yo pude oírla, será una señal –todas estas preguntas y conjeturas lo dejaron algo aturdido, decidió desecharlas por el momento y concentrarse en lo que de verdad era real, tenia que darse prisa, la última prueba se celebraría cuando el Sol estuviese en su cenit, y la caminata hasta el punto de encuentro era bastante larga.
Desayunó con toda su familia, incluida su madre, su querida madre Teresa, que le abrazó tan fuerte que podría haber partido en dos el mundo de tanto amor desatado.
-Hijo, has trabajado muy duro desde que tu padre fue asesinado –le dijo su madre
-Ten cuidado, no te desconcentres, no sucumbas al odio; sabes que yo estaré ahí, siempre a tu lado, al igual que tu padre, que tanto te quería –terminó Teresa.
-No os fallaré madre, y prometo volver, como un gran héroe, para protegeros, y ser felices –expuso Ray a la vez que terminaba su ración y se levantaba para marcharse.
Pocas fueron las despedidas, un Filo Cruzado no ha sentirse apenado, ya que lo desconcentra, y lo distrae de su cometido.
La ciudad estaba como siempre, medio derruida y desorganizada, todo lleno de cascotes, antaño grandes edificios y preciosas avenidas, ahora reventadas y destruidas. La poca gente que vivía entre los escombros, salía temerosa de que una incursión orca o una banda de gholls, les atacaran y les arrebataran sus pocos bienes, miradas desconfiadas que parecían las de animales acorralados por un cazador.
De entre los arruinados inmuebles, apareció una figura parecida a la de un humano, que se acercó a Ray y se dispuso a golpearle en la cabeza con su puño derecho. El joven esquivó el golpe con facilidad y el brazo de su agresor quedo suspendido en el aire. Con un rápido movimiento de sus dos extremidades superiores, Ray agarró con la mano izquierda el apéndice enemigo, que era incapaz de resistirse, pues se había quedado sin fuerza, debido a la gran energía que desencadenó intentando herir al aprendiz de Filo Cruzado. Entonces propinó un golpe tremendo con el antebrazo derecho, y dejando libre el miembro enemigo, este empezó a dar vueltas por el aire, y fue a aterrizar sobre un antiguo coche, que lucia destrozado desde la gran guerra, al igual que las construcciones de alrededor.
Ray se dirigió hacia su agresor, con la cara desfigurada por la agresividad que lo estaba dominando.
-¿Quién eres? –fue la simple y directa pregunta del aprendiz.
-Por todos los santos, ¡soy yo! Tu amigo Axel Cruham –respondió el asaltante. Ray titubeó unos instantes y se dio cuenta que era en verdad su camarada de la academia el que hablaba, y no un simple ladrón.
-¡Coño! Axel, ¿Qué estabas intentando? – indagó el aprendiz a su conocido.
-Je je je, veo que entrenas bien en casa, ¿Jamás podré vencerte? –fue la respuesta del aparecido.
-No, nunca podrás vencerme si no controlas más tus movimientos –rió Ray mientras ayudaba a levantarse a su compañero de aventuras.
Cruham era un semiorco muy jovial, amistoso y optimista, y se había ganado la fama de ser el único ser de la ciudad capaz de decir algo y pensar en otra cosa mientras sus manos estaban ocupadas en otros quehaceres. Había sido amigo de Ray desde que los dos entraron en la academia de los Filos Cruzados. Más ágil de pensamiento que su amigo, Cruham sabía como sobrevivir sin nada, utilizar algo de magia y pensar estrategias en muy poco tiempo. Al contrario, Ray no era muy listo pero su forma de combatir era inigualable, lo cual le daba ventaja, o se ponía a la altura de los peligros del mundo en que vivían. Juntos eran un buen equipo, y más de una vez habían dejado sorprendidos a los instructores de la academia con sus actos conjuntos.
-Hoy es el gran día amigo mío –le dijo Axel felizmente extasiado por el momento.
-La prueba de hoy será de verdad, no más maniquíes ni enemigos de mentira, hoy los adversarios serán de carne y hueso –le comentó a Ray a la vez que salían de la ciudad y se internaban en los áridos parajes de su mundo devastado y casi extinguido.
La academia de los Filos Cruzados se perfiló en el horizonte, un edificio antiguo, ricamente construido, no muy alto pero si ancho, erigido en tiempos aun más oscuros que los que acontecían, justo después de la apocalíptica batalla que dejó diezmado a la población mundial y trajo consigo extrañas criaturas, algunas de constituciones y rasgos parecidos a los humanos, otras de formas diversas, aberraciones antinaturales producidas por mutaciones del medio ambiente. La magia también entró en el mundo y con ella nuevas transformaciones y peligros. Los valientes y heroicos humanos de la época consiguieron expulsar a los demonios que atormentaban el mundo, sin embargo el mal no se erradico del todo, y razas como la orca subieron en poder, controlando ciudades enteras y organizando ejércitos enteros.
En ese período fue fundada la academia donde ahora estudian Ray y Axel, entrenados para destituir el mal del mundo que aumenta cada día, instruidos en artes de batalla con las cuales destituir del mundo a los enemigos de las buenas acciones.
Allí los esperaba Fhorbbus Caytor, su maestro desde su admisión en la academia. Su expresión era seria, como siempre, pero Ray pudo notar algo en su impasible semblante. Estaba contento y orgulloso de que sus alumnos hubieran llegado tan lejos, por fin formarían parte de la orden.
-Muy buenas, acólitos – dijo Fhorbbus –hoy será la prueba definitiva para convertiros en verdaderos Filos Cruzados –continuo –y con la gracia de Dios desterrar al mal de estas nuestras tierras –y dicho esto dio una palmada amistosa a Ray en el hombro.
-¿Lucharemos juntos? –preguntó inquieto Axel.
-No, lo siento, sé que sois un gran equipo, pero la prueba de hoy requerirá toda la concentración posible por parte vuestra. Uno solo contra el peligro, así a de ser-. Aclaró el maestro.
-Pero señor nosotros... –empezó el semiorco.
-He dicho que no, y no hay más que hablar –lo interrumpió Fhorbbus –y ahora Cruham, dirígete a la torre sur, allí comenzará tu prueba, ¡vamos a que esperas! –terminó el maestro.
El camarada de Ray se fue, no sin antes dirigir una melancólica mirada a su amigo. Cuando dejó de ver a Cruham, el aprendiz dio media vuelta y miró a su instructor, este le devolvió la mirada.
-Tu padre fue un gran hombre, lo sabes verdad –preguntó de repente el Filo Cruzado, dejando atónito a su subordinado. Jamás Fhorbbus le había hablado sobre su padre, siempre cambiaba de tema cada vez que él lo sacaba a la luz, y sin embargo ahora, empezaba a parlamentar sobre él –si señor, Arux Dragonstate fue un gran guerrero, fiel a la causa y al código, incapaz de hacer daño, pero asesino de los que si lo hacían –el Filo Cruzado levantó la cabeza y miró al cielo, como recordando tiempos pasados –ahora tú eres su descendencia, demuéstrame que procedes de la misma casta –y dicho esto agarró a Ray por los brazos y lo zarandeó débilmente.
-No te preocupes maestro, no te defraudaré, al igual que no defraudaré la memoria de mi padre –expuso el aprendiz.
Los dos marcharon por los alrededores del complejo que formaba la academia y Fhorbbus le indicó lo que debía hacer para completar su instrucción.
-Ray, te acuerdas de la cueva que hay en los suburbios de la parte norte de Murcaren, la ciudad donde vives –inquirió el maestro.
-Si la conozco –respondió el joven.
-Veras, a sido confiscado por un grupo de criaturas desconocidas y amenazan la integridad de la ciudad, habríamos enviado a alguien para erradicar el problema, pero decidimos postergarlo para que sirviera de prueba a los aprendices, tú tendrás ese honor. Esto puede ser como tu primera misión aunque aun forme parte de tu entrenamiento, pero no dista mucho de las verdaderas misiones. Suerte Raúl Dragonstage, y recuerda, estarás tú solo ante el peligro.
Ray se dirigió a la cueva que había descrito su superior. Más que una gruta era un agujero que se internaba en las profundidades de un antiguo bunker u algo similar. Las paredes eran restos de lo que antaño fueran grandes bloques de acero blindado, el suelo era metálico, pero presentaba enormes imperfecciones, enormes abolladuras y huellas que el tiempo no había conseguido borrar sobre una batalla realizada en el interior. Restos humanos se desperdigaban a uno y otro lado, trozos de pared desgarrados por impactos de bala y espadas y lanzas se retorcían como en un último intento de vencer la ofensiva ya perdida.
El lugar era oscuro y la humedad era enfermiza, pero ni rastro de las criaturas a las que Fhorbbus había hecho referencia.
Ray preparó sus armas, unos guanteletes de hierro forjados por el mismo con acero y tela, sin acabar en la punta de los dedos cortados a partir de los nudillos.
Bajó aun más abajo, internándose en las profundidades del bunker. Llegó a una gran sala, casi totalmente destruida, medio techo se había desprendido, desparramándose por el interior del recinto, dejando un gran eslabón de metal atravesando desde la superficie hasta los pisos inferiores de la edificación. Tan grande era la columna de metal que llegaba a ocupar casi totalmente la estancia. Del agujero producido por la caída del contrafuerte metálico, se filtraban algunos rayos de luz. Por la inclinación Ray dispuso que seria por la tarde, ¿Tanto tiempo había estado bajando? No lo sabia pero si seguía sin encontrar a sus enemigos, se haría de noche y la cosa se complicaría.
Por todos lados había objetos rotos, herramientas y pantallas destruidas, cables que algún día tuvieron corriente circulando por sus hilos de cobre, planchas de diversos metales esparcidas, puertas arrancadas de sus goznes y desperdigadas por el suelo, cascotes caídos del techo, y muchos objetos que se encontraban en una situación parecida. El ambiente era caótico y la poca luz que entraba a través del orificio del techado no daba ningún alivio, ni rompía las siniestras penumbras azuladas que se cernían entorno al aprendiz.
Ray se acercó un poco más hacía la enorme estructura derruida, intentando mantener el equilibrio, mientras caminaba por los restos del antiguo bunker. Pudo ver los tremendos bombazos que habían producido tal destrozo en el pasado, descomunales hoyos producidos por explosiones de fragmentación.
Algo al otro lado de la estructura derrumbada, hizo un pequeño ruido casi imperceptible, pero el aprendiz lo escuchó, y se dispuso para el combate, agachando ligeramente las rodillas y llevando los brazos hacía delante, estirando los dedos y pensando en las posibles ventas y desventajas que le proporcionaba el devastado terreno. Miró a su alrededor, intentando abarcar toda la superficie posible para poder reaccionar si era atacado. El silencio se hizo con el poder de la sala y ningún nuevo ruido pudo ser escucho por los oídos del joven. Temeroso de que fuera asesinado por sorpresa, dio varias vueltas sobre si mismo, para cerciorarse de que nada ni nadie se movía a sus espaldas. Puede que no lo quisiera reconocer, pero el miedo estaba haciendo mella en su espíritu, torturándolo de tal modo que creyó haber perdido el sentido unos segundos para después encontrarse solo de nuevo ante el peligro.
Pero ¿qué le estaba pasando? Todos estos años de entrenamiento para qué, para sucumbir al temor de la muerte que tanto lo había perseguido en todos estos años. Tenia que ser fuerte, que concentrarse, era un guerrero y estaba preparado para situaciones desesperadas. Había sido instruido para convertirse en un Filo Cruzado, y para ello tenia que superar los miedos de su infancia y transformarse en un adulto. En ello había empeñado toda su vida, no podía echarse ahora atrás, no ahora que estaba tan cerca de conseguirlo.
De detrás del eslabón de hierro caído del techo, saltó una figura parecida a un humano, el tremendo impulso que había sido desatado llevó a la criatura hasta el otro lado de la estancia, unos veinticinco metros desde la posición en la que se encontraba el joven aprendiz. El ser que había hecho su aparición era de fisonomía parecida a la humana pero andaba encorvado y su piel era lisa, sin desperfecto alguno, rodeada por algún tipo de líquido que hacía que la superficie membranosa brillara sutilmente. Sus piernas eran muy largas, articuladas tres veces, una en la cadera, otra en la rodilla, y la última en una extraña unión que se curvaba hacía afuera, de forma contraria a la de la rodilla. El torso se componía de una delgada cintura, en exceso quizás, que iba agrandándose a medida que subía la línea del cuerpo, hasta convertirse en un formidable pectoral que se ensanchaba hacia atrás. Los brazos eran fuertes y eran muy prolongados, tanto que los nudillos casi tocaban el suelo sin necesidad de agachar el cuerpo. La cabeza tenia rasgos típicos de los humanos, dos ojos, una boca, y la forma pelicular del perfil de una cara, sin embargo, no poseía orejas, ni nariz alguna, en vez de eso la superficie de la faz de la criatura se alargaba en este punto hacía afuera, formando un ángulo obtuso. Los dedos de manos y pies estaban unidos por unas membranas fangosas y traslúcidas. Se trataba de un anfibiodo.
Ray miró al recién llegado y sin dejarse intimidar, superó sus miedos y cargó contra la criatura. Está saltó de nuevo y se colgó del techo, que se encontraba a unos quince metros de altura. Desde allí abrió su descomunal boca, y de ella salió disparada una delgada y muy larga lengua que impactó en el hombro del aprendiz, haciéndole caer al suelo. El prolongado apéndice era pegajoso y quedo adherido a al piel de Ray. Este intentó deshacerse del horrible órgano de la criatura, pero sus esfuerzos fueron en vano. El viscoso apéndice empezó a tirar del aprendiz hasta suspenderlo en el aire.
Nuevas de estas criaturas se plantaron en la amplia estancia, armados con hojas quebradas, pero de aspecto espeluznante. Estas estaban atadas toscamente a sus muñecas con cuerda, de modo que los trozos curvos y afilados que hacían las veces de arma cortante, quedaban por debajo de sus antebrazos. En total formaban seis enemigos, que empezaron a rodear a Ray. Este incapaz de hacer nada colgado como estaba de la lengua del anfibiodo, comenzó a moverse frenéticamente para deshacerse del asqueroso miembro que lo aprisionaba.
Una de las criaturas, alargó el brazo con la intención de arremeter contra el abdomen del joven, pero este propinó una patada en la cabeza del enemigo antes de que pudiera ensartarle. Desesperado por su inferioridad, Ray concibió un plan. Comenzó a escalar por la lengua del anfibiodo. Era totalmente legamosa al tacto y su olor era casi más horrible todavía. Haciendo acopio de toda su fuerza, el aprendiz logró subir hasta el techo. La criatura, viendo tan cerca suya el peligro, decidió soltar su apéndice bucal e intentar escapar pero Ray estaba muy bien agarrado a su lengua, y no consintió que el anfibiodo se escabullera. Él y la criatura cayeron al suelo. Creando un coro alrededor de las otras alimañas.
-Parece que está muerto –dijo una de las criaturas, con una voz gutural y apenas entendible. Las demás se acercaron a los cadáveres del intruso y de su compañero. Se fijaron que su compañero aún respiraba.
-Pero si el esta vivo, el otro...- Ray no le dejó tiempo para terminar la frase , se levantó de un salto y le propinó un puñetazo . Luego se dio la vuelta y se dispuso a que lo atacaran, pero en vez de eso, los anfibiodos se alejaron temerosos del joven. Este, extrañado por esta conducta, se dispuso a parlamentar con las criaturas.
-Me llamo Ray Dragonstate, soy un Filo Cruzado, y he venido para expulsaros de las tierras de Murcaren –comenzó el aprendiz con tono fuerte, intentando intimidar a las alimañas que le habían atacado –teneis hasta el ocaso para iros de aquí –continuo aparentando seriedad y confianza, le empezaba a gustar su trabajo –si no, series erradicados –terminó y dicho esto esperó la reacción de los anfibiodos.
Se desencadenaron una serie de susurros, y cuchicheos, entre los miembros del clan; algunos decían de marcharse, y otros que debían esperar la decisión del shamán.
Una luz roja invadió toda la sala, y los anfibidos comenzaron a gritar como locos, los cascotes desperdigados del suelo, empezaron a vibrar, y Ray tubo que esforzarse por mantener el equilibrio. El foco luminoso remitió de repente y de su centro apareció otra criatura, similar a los anfibiodos pero más alta y con unas prolongaciones cilíndricas en sus hombros. Estaba vestido con una capa marrón oscuro casi por completo carbonizada, y portaba un báculo, de tosca superficie y sencilla decoración.
Las otras criaturas gritaban sin parar y Ray alcanzó a comprender algunas palabras como la de shamán, todopoderoso, y cosas del estilo. El joven dedució que este nuevo ser que tan portentosa entrada había realizado, se trataba del superior de los anfibíodos. El recién llegado miró fijamente al forastero, clavando sus ojos en lo profundo de su ser.
-No temáis, mis adeptos, este hombre no dice ser quien es en verdad –dijo el shamán dirigiéndose a sus subordinados –matadle –ordenó, y sin más preámbulos, el jefe del clan, se dispuso a utilizar su magia. Los demás anfibiodos cargaron contra Ray, furiosos en lo infinito.
Ray cargó también contra sus enemigos gritando de rabia. El primero de los anfibiodos fue tirado al suelo de un solo golpe, rompiendo la nariz de la desafortunada criatura. El choque además envió a la alimaña hacia atrás con una fuerza increíble, tirando a uno de sus compañeros que iba a sus espaldas. Los cuatro adversarios restantes rodearon al intruso, dos a su espalda, otro delante y uno más en el costado izquierdo. El que estaba situado frente a frete con Ray, dio un revés con su arma, mientras uno de los que estaban detrás, le dio una patada en las rodillas. El joven, consiguió agacharse a tiempo para que el filo curvo no le hiciera nada, pero el golpe dirigido a sus rodillas, dio en el blanco, y el joven perdió el equilibrio, cayendo al suelo aparatosamente. El enemigo que se apostaba a su izquierda, destinó su afilada arma hacia abajo con toda su fuerza. Incapaz de esquivar el golpe, Ray alargó una de sus manos y frenó la trayectoria del quebrado filo, y viendo la oportunidad, arremetió contra la criatura, organizando una llave con sus tobillos, haciendo caer al anfibiodo encima de él. Una de las criaturas colocadas a su espalda sesgó una itinerario parecido al anterior pero Ray se desembarazó de la criatura que estaba encima suya lanzándole al aire, entonces pudo esquivar el arma con una voltereta en el suelo y mientras se levantaba le dio una patada en la cara dejándole inconsciente. Ray se colocó de cuclillas, dispuesto a saltar sobre el enemigo que tenia enfrente, mientras uno de los anfibiodos gritaba a su compañero por no haber matado aun al joven, momento que Ray aprovechó para lanzarse sobre su adversario. Este sorprendido, no se resistió demasiado y fue a caer al suelo ,donde por desgracia para el se erredo con unos cables que lo dejaron fuera de combate.
Los dos anfibiodos que quedaban, estaban algo amedrentados, ya que sus camaradas habían sido vencidos con gran facilidad pero por alguna razón sus miedos se disiparon súbitamente, vencidos por una fuerza que el joven aprendiz no conseguía entender, y sus rivales se abalanzaron sobre él con las armas en alto. A simple vista se podía observar que no eran muy buenos espadachines y además el curioso sistema con que utilizaban sus filos era de lo más incomodo, pues el que estuvieran enrollados en las muñecas, dificultaba la movilidad de las mismas. Pero también hay que decir que con esas toscas manos membranosas pocos utensilios serian capaces de ser manipulados con eficacia.
Ray se dispuso a parar la arremetida de sus oponentes, cuando repentinamente, una descarga de energía desconocida para el aprendiz, azotó su cuerpo dejándolo parado a escasos metros de sus enemigos. De nuevo, la descarga de fuerza invisible, estalló en el la cara del joven, dejándolo aturdido. Los anfibiodos alcanzaron a Ray y le propinaron un golpe con el hombro los dos a la vez, haciendo caer al muchacho al duro suelo de hierro. Rápidamente miró al shamán que se encontraba a su espalda, él tenía que ser el causante de las descargas energéticas, pensó el aprendiz mientras se levantaba, esquivando los sesgos de las armas de los anfibidos.
El hechicero enemigo se encontraba protegido detrás del eslabón de metal caido, que atravesaba el techo y llegaba hasta el subsuelo. Ray aceleró sus pasos y corrió la más rápidamente que pudo, sorteando los rayos de poder del shamán con los puños de hierro, que empezaron a calentarse peligrosamente. Subió la superficie cilíndrica de la columna de acero derruida y al llegar a la posición donde se encontraba el jefe del clan por debajo de la estructura derrumbada, dio un salto como le habían enseñado en la academia, utilizando la pared para dar un último impulso y acabar detrás del oponente. Entonces cogió los brazos del hechicero y utilizando una llave que el mismo había desarrollado, tiró al shamán por los aires. La perfección con la que había ejercido el golpe, le sorprendió a él mismo, el tornado humano nunca le había salido tan bien como ahora. El hechicero acabó a siete metros de donde había estado originalmente. El shamán se intentó levantar pero Ray el cogió sus brazos y los ató con un cable que había encontrado. El jefe del clan le miró, pero recibió un puñetazo que lo dejó sin conciencia.
Los anfibios se rindieron y se arrodillaron, pidiendo piedad y lloriqueando a los pies del joven. Joven que desde aquel día jamás volvería a llamarse: aprendiz, pues a partir de ese momento se había convertido en un verdadero Filo Cruzado.
Al salir de la cueva el Sol empezaba a ponerse por el oeste, dando al desierto tonalidades rojizas, al igual que el cielo que se mezclaba con la oscuridad de la nueva noche pasando por toda una gama de hermosos colores, desde el violeta, al amarillo intenso, pasando por un ligero verde. A la lejos varias figuras humanas se perfilaron en el horizonte. Ray estaba exhausto, la pelea, la caminata con los anfibidos a cuestas y los rayos mágicos del shamán que le habían robado parte de su energía, le habían dejado al borde del colapso, pero saber que a partir de ahora pertenecía en cuerpo y alma a la orden, le daba las fuerzas suficientes como para mantenerse vivo. Si los dos anfibidos que quedaban conscientes se hubieran rebelado, el joven no hubiera podido detenerlos y habría muerto, pero estas criaturas no son famosas por su inteligencia, de modo que lo único a lo que se limitaron fue a mirar a Ray como a un ser poderoso que había conseguido vencer al jefe de su clan.
Las figuras se acercaron a la cueva y al llegar encontraron al joven inconsciente, pero con una sonrisa bien dibujada en su cara.
Ray empezó a abrir los ojos, no sabia si había muerto o no, pero esta incertidumbre duró poco, pues al intentar moverse, su espalda protestó y no le dejo moverse con la facilidad con la que quisiera. Le dolían los músculos de los brazos, prueba más que convincente para no pensar en estar muerto. Al mirar a su alrededor reconoció la enfermería de la academia. Y a su izquierda se encontraba Axel, dormido del todo, roncando bastante y cayéndosele la baba a un lado.
-Despierta, amigo mío –dijo Ray dando unos amistosos golpecitos a su compañero –que te has dormido –le amonestó, y los dos empezaron a reír.
Con el amanecer Ray y Axel, fueron condecorados en la academia y se les dio la distinción que los describía como guerreros de la orden de los Filos Cruzados. Nuevos peligros les esperaban, nuevos viajes que realizar, gente a la que ayudar y el merecido premio de la distinción como luchadores; aquellos que buscan la paz, en un mundo sin esperanza, donde solo los sueños aportan el preciado don de la vida.
Ray se encontraba en la parte superior del edificio que hacia las veces de iglesia en el pueblo de Murcaren. Allí se sentaba siempre que podía y pensaba en su vida, se preguntaba su significado, y miraba hacia atrás para recordar a su padre. Hoy se encontraba apostado entrecerrando los ojos, cavilando sobre su futuro y su nueva misión. Le habían mandado que buscara a un tal Stephen Mcarthur. No sabia muy bien la razón, pero había decidido que después de que se curaran sus heridas, empezaria a ejercitar nueva misión con todo su espíritu, empezaría a conocer nuevos mundos.
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Posted: Fri Sep 17, 2004 2:46 pm
MUAHAHAHA!! Lo consegui!Y sin tener q cortarme una oreja!!Ya los subi, mirad: Para Zellia el 1º: Uno dedicado a Serpi: Otro para Zellia: Y aqui hay uno mio: Por ultimo, la prueba de que soy 1 artista!!: MUAHAHAHAHAHA!!!
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Posted: Fri Sep 17, 2004 2:49 pm
Grandes, malos y en blanco y negro, pero es lo q hay d mi parte...
CONTINUARA!!
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Posted: Fri Sep 17, 2004 2:50 pm
Er... se parecen mucho, o es que no los has conseguido subir? xp
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Posted: Fri Sep 17, 2004 3:17 pm
estaba aclarando las cosas, pero se supone que AHORA se ven, yo los veo (tengo ojos, y salen en la pantalla, q mas se puede pedir?)
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Posted: Sat Sep 18, 2004 4:48 am
Wapíximos, Morphine, WAPIXIMOS! biggrin Me encanta ese estilazo sencillo y cute k tienes! (propio de Doremi, SEGURO xp )
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Posted: Sat Sep 18, 2004 6:41 am
WOOOOOOOOOOOOOO, morphine el q mas m ha gustao es el 1º!!!! q zorrito mas monouuuuuuuuuuuuuuu, q rica ta zelliaaaaaaaaaaaaaaa,,q punto lo del bocadillo de jamooooooooooooooon xd xd xd Ademas el trazado es mu limpio, queda muy cute blaugh
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Posted: Sat Sep 18, 2004 11:36 am
Si esq yo inspiro a to el mundo xd Morphine dibuja stilo Magical Doremi y tu lo sabs serpi blaugh como t gusta esa serieee e morphineee blaugh
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Posted: Sat Sep 18, 2004 5:52 pm
Nuko666, m encanta tu historia!!!! en serio, a ver si sigues!!! 3nodding
(a mi tmb m mola la primera zellia& yucie-bocata-d-jamon xDDD tan monisimaaaaaas!!
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Posted: Sun Sep 19, 2004 3:58 am
Otrooo! MUAHAHAHAHA!!!DEMASIADO TARDEE!
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Posted: Sun Sep 19, 2004 4:00 am
Deliath Nuko666, m encanta tu historia!!!! en serio, a ver si sigues!!! 3nodding
(a mi tmb m mola la primera zellia& yucie-bocata-d-jamon xDDD tan monisimaaaaaas!!
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Posted: Sun Sep 19, 2004 10:25 am
Es 1 trio Zellia-Morphine-Serpi+serpiente x detras SIEMPRE PODRE DIBUJAR COMICS!!!INSPIRADME!
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