|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
 Posted: Mon Jun 15, 2009 12:39 pm
índice:
-Quien soy y por qué escribo?
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Mon Jun 15, 2009 12:46 pm
Prólogo
¿quién soy? ¿Porqué escribo?
Cuando ya no sabes q hacer, porque pierdes la cordura en cada paso, no queda otra q la retrospectiva. La verdad hace que no perdamos el camino, que no perdamos la luz.
Yo ya me estoy confundiendo con las sombras, supongo q es por eso q cada vez me es más facil manejarlas.
Quién soy?
Me dicen guerrera. He luchado, he peleado, he gritado en la noche. He temido al fuego, he caminado en la lluvia, he viajado en las smbras. Fuerzas antiguas me han golpeado, y yo he devuelto el golpe.
Mi nombre es Kiaori Sarah Reeves, y esta es mi historia.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Mon Jun 15, 2009 1:01 pm
La casa en la pradera.
Mis priemro recuerdos son confusos. Rie una muchacha, creo q es mi hermana. Hay flores, muchas flores de colores brillantes. Un ríachuelo cristalino y rápido salta entreunas colinas suaves.
Hay un estandarte sobre una chimenea, pero no recuerdo el dibujo. La casa es de madera, las escaleras son de hierro forjado.
Papá y mamá son altos, no recuerdo sus nombres, pero si sus sonrisas. Mamá se parece más a mi, me llama Ori-Chan. Mi hermana se parece más a papà- Tampoco recuerdo su nombre.
Y recuerdo que era una noche de primavera en la que hacia mucho calor. Teníamos camisones blancos,mi hermana y yo. La habitación q compartíamos estaban en el piso superior. La luna brillaba con fuerza, mi hermana se cepillaba el largo cabello rubio.
Luego me dormí. Y no creo haber soñado nada, o haber dormido mucho rato, porque cuando ella comezó a sarandearme con fuerza, no sentía haber descansado nada.
-Ori chan! Ori chan! rápido, bajemos, ten cuidado, sígueme- dijo ella.
-Hai, Hai! -traté de apurarme. Por qué había tanto humo? por qué la casa crujía? Por que el calor había cambiado?
Cuando salimos al rellano y vimos todo en llamas, yo solo sentí las manos de mi hermana aferrandome con fuerza.
-Por las escaleras, por las escaleras.-me gritó. Ella bajó como un rayo. Yo estaba asustada de como crujían las tablas y me cojí del barandal de hierro. Las cicatrices de las quemaduras perduran hasta hoy en la palmas de mis manos.
Gritando y llorando con todas mis fuerzas y las manos en carne viva, llegué hasta el infierno q se había destado abajo. No veía a mi hermana, ni a mi madre, ni a mi padre. Una viga en llamas cayó sobre mi, pero no me hizo daño, porque No había caído sobre mi
Entonces no sabía nada, solo q el terror era absoluto. No sabía q aquello q me impedía avanzar en las llamas, q me reteneía encerrada en un círculo, era un campo de fuerza. Estaba a salvo y yo solo podía llorar y llorar y llorar.
Y ahí las vi. Vi el cuerpo de mi madre, abrazando a mi hermana, Ambas abrazadas , tiradas en el suelo, mientras el fuego consumía sus vestidos y sus cabellos. Mamá mvió su cabeza. La mitad de su cara estaba quemada, pero sus ojos aún veían.
Veían. Veían. Me veían a mi. y luego yo ya no vi nada más.
Cuando desperté sentí el rocío frío de la mañana en mi cara. El cielo estaba gris y todo olía a humo. Yo olía a humo. Habí un hombre a mi lado. Tenía una espada en una mano y un cigarrillo en la otra. Me miró y me sonrió.
-Que bien q estas sana, nena. -Dijo dejando caer la espada.-Lstima q no puedo decir lo mismo de tus viejos, q le vas a hacer?
-Quién es usted, señor?
-Yo soy el q te salvó nena. Ahora eso es tuyo -señaló la espada- nos volveremos a ver. Y ahí no más, desapareció. Junto con mi vida, junto con mi niñez.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Mon Jun 15, 2009 1:29 pm
La niña del orfanato.
A partir de ahí, todo se vuelve un poco difuso. Recuerdo haber estado en un hospital, y q muchos hombres mayores me hablaban.
Todos daban explicaciones por el incendio, no creo haber recordado ninguna. Perdí de vista la espada q el hombre había dicho q era mía. Mis manos cicatrizaban.
Vivía en la ciudad, en un orfanato. Desde las ventanas veía las altas chimeneas industriales q hacían de uestro cielo un compendio de nubes grices.
Eramos muchas niñas de historias más o menos trágicas. Niñas sin luces en los ojos, sin voluntad en las manos, sin vida en la voz. Con blusas remendadas y oscuras, con largas faldas de lana y borcegos agujereados salíamos a la ciudad, con cofias blancas
sobre nuestros cabellos sucios y mal peinados.
Vendíamos velas. Ganabamos poco dinero vendiendo velas de puerta en puerta. A veces nos daban algunas cuantas monedas de más, que la directora del orfanato nos quitaba cuandollegabamos.
A veces algunas niñas no volvían. Era frecuente q se escaparan, o q las retuvieran. O q se perdieran y murieran en una noche fría.
Los martes y los jueves teníamos lecciones. Las niñas mayores decían q el profesor anterior al q teníamos era mejor q este. Este llego el mismo día q yo llegué al orfanato.
Nadie se acercaba mucho a mi. Todas tenian historias trágicas si, pero ninguna tenía cicatrices como las mías. Un día me hice de un par de guantes, si, pero el daño ya estaba hecho.
Las lecciones me gustabany mi profesor me tenía afecto. A pesar de estar sola, me gustaba correr. Corría mucho a pesar del clima frío y lluvioo de mi ciudad, y el patio del orfanato era amplio y verde. Eran mis primeros entrenamientos.
No le tenía miedo a la oscuridad, pero si al fuego. No le tenía miedo a los hombres ni a la soledad, pero si a la maldad q se escondía en ellos. No hablaba mucho, pero cuendo lo hacía, decía cosas q hacían la diferencia.
Era una niña seria, antisocial, tratar con cuidado. Creo q eso decía mi legajo.
Un día salimos con Nanami a vender velas. Nanami era una niña pelirroja encontrada en los barrios bajos.No tenía muchos problemas conmigo y a mi no me importaba. Creo q fue mi unica amiga en aquella época.
Ese día gris veíamos con las canastas bien cargadas. Ella reía haciendo sonar las monedas de plata en su delantalcito.Cuando empezó a llover, tomamos por unos callejones a ver si podíamos llegar al hogar más rápido y sin mojarnos, auqneu fuera más peligroso.
Y lo fue.
Ser niñas pekeñas, en una ciudad, nunca es fácil. Y si estas desprotejida, fuera de toda ley, en un callejón oscuro, un día de lluvia, bueno... solamente puedes contar con q todo esté peor.
Un borracho toma a tu unic aamiga por la cintura infantil y le arranca la cofia blanca. Otro te toma a ti del cuello. No puedes respirar, no puedes pensar. Otra vez desesperación y Nanami llora. Y hay risas, risas de hombres grandes q ya no tienen nada y van a hacer q dos niñas lo pierdan todo tambien.
Me sacan la cofia, me rebolean por los cabellos. Yo grito. Todos gritan conmigo y caigo al piso adquinado y mojado. Me incorporor como puedo y miro frente a mi q la lluvia atravieza como agujas las manos, las garants los cráneos de esos hombres. Nanami me mira mientras la sangre de los hombres le cae encima.
Las dos lloramos y corremos. Corremos llorando al hogar.
Yo miro hacia atrás. Hay dos cuerpos en la calleja mojada.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Thu Jun 18, 2009 9:39 am
Entrenamiento seguro.
Un click me hizo en la cabeza. Repasando la escena bajo la lluvia una y otra vez, me di cuenta de que las cosas podían cambiar. Cambiarían, si, porq yo cambiaba.
Me sentaba junto a las fuentes y me concentraba. Podía hacer q el agua se moviera,danzara a veces. Tomaba forma. Y mis poderes también
Nanami no habá vuelto a hablarme desde ese momento. Yo sabía q me tenía miedo. Y en cierto sentido, yo tmb lo tenía, pero también emoción. Yo era algo fuera de lo común y lo explotaría.
Comencé a pedirle a mi maestro q me trajera libros de magia. Yo decía q eran un juego, pero creo q el se dio cuenta que no lo decía en serio. Lo q encontré en esos libros fueron estupideces en su mayoría.
Nada me ayudaba a mi o a mis poderes, aunque yo tenía la sospecha de q lo q hacía era magia.
Seguí haciendo las cosas por mi cuenta y un día, sobre mi cama encontré una espada de madera, un bokken. En mis momentos de soleadad, practicaba con eso tmb.
Me era facil y endurecía mis brazos como correr endurecía mis piernas. No me pregunté quien habia sido el q me diera la bokken, pero en mis sueños era el hombre del cigarrillo.
Y así pasaban los meses y los años. Vendiendo velas, corriendo, practicando, casi sin hablar.No tenía tecnica, solo voluntad.
Hasta que un día volví a mi habitación y allí había una katana. Una hermosa katana y una nota.
"Ya estas lista"
Yo tenía 13 años.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Thu Jun 18, 2009 9:50 am
Primeros pasos.
Claro que sería totalmente absurdo seguir los consejos de notas anónimas, Agarrar la katana, todos mis ahorros (y un poco del de los demás) mis mejor calzado y ropas, sacarme esa estúpida cofia y recorrer el mundo como
una forajida.
Pero, nunca fui una chica de muchas luces, así q eso fue exactamente lo que hice.
Estaba harta y haría mi propio camino, seguiría la senda de Kiaori, o lo que me gustaba llamar "la senda de la luna"
¿por que? muy facil. Me gusta la Luna.
Así fue q una noche de estío, con un atado al hombro con mis pocas pertenencias y una katana, Yo me fui del orfanato, esperando con todas mis fuerzas nunca jamás tener q volver. Hasta ahora, nunca lo hice.
Jamás miré atrás mientras caminaba bajo las estrellas y me alejaba de los barrios bajos.
Llegué así a la zona alta de la ciudad, donde los carruajes llevaban señoras ataviadas con hermosos kimonos de seda y donde las luces de los candelabros iluminaban más que las dos lunas en el cielo. Pronto me daría cuenta de que esa era una de las peculiaridades de mi dimención.
Yo miraba maravillada desde las sombras, pero sabía q ese no era mi destino. Jamás usaría un kimono como esos, jamás viajaría en carruaje. No, yo iba a ser una guerrera. Era muy idealista, ahora q lo pienso. Bueno, ahora también lo soy.
En fin, recorrí la zona hasta que empezó a deshabitarse y ahí por primera vez, me di cueta de dos cosas q jamás olvidaría en toda mi vida:
la primera: yo era (soy) estúpida.
la segunda: oscuridad en la ciudad = crimen.
pero yo me veía como una heroína, un ángel vengador, un caballero oscuro...salvo q más delgada y esmirriada.
Y aprendí por las malas que uno no debe confiarse.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Fri Jun 19, 2009 1:50 pm
El primero.
Cuando los locales se cerraron y las luces abandonaron la calle, solo los personajes más sórdidos quedaron rondando. Muchas prostitutas caras salieron de sus escondrijos, rateros, borrachoas y violentos tmb. Q pinturita.
Tuve la impresión de que si me quedaba quieta podía llegar a desentonar, así q comencé a moverme. Me estaba agarrando miedo, mucho miedo, producto de no saber como funcionaba la ciudad cuando se ponía el sol.
Pero tenía q controlar, entender y domianr ese miedo, desterrarlo de mi misma. Si podía entender la ciudad, podía entender el crimen, si podía entenderlo, podía reducirlo y yo podría crecer de esa experiencia.
Y así pensaba mientras caminaba mirando todo con temor, haciendo tintinear mis pertenencias mientras tiritaba. Debí haber dado mucha lastima-...
Pero toda presa fácil, debe ser tomada. Y yo no era facil, era super super facil. Y fue cuestión de una hora para q me arrastraran hacia un callejón oscuro, húmedo y silencioso. Priemro me quitaron mis cosas en el hatado y luego me dieron una buena tunda que una persona normal no hubiera sobrevivido.
Pero yo me mantuve en pie, casi de milagro. Al parecer mi complexión es distinta a la de los hombres y mujeres normales, y creo q mis agresores tmb lo notaron en ese momento porq me miraban raro, algunos reían y aprontaban sus puños para seguir. Yo sangraba por todos lados y no acertaba a desenvainar la katana.
Me la quitaron e intentaron golpearme de nuevo, pero una espcie de escudo se los impidió. Me había concentrado en esquivar el golpe, pero al no poder moverme, creé algo q no sabía q podía. Al perfeccionarlo, lo llamé Moon Shield.
Los sorprendió el escudo de chispas, q también los encandiló y corrí a recuperar mi katana. El cuerpo me dolía y estaba cansada, pero seguía en pie. Era pura voluntad.
Desenvainé y esperé q me atacaran de nuevo. Fue facil q me subestimaran y así pude intentar reducirlos. Uno huyó, creo q pensó q no valía la pena tanto esfuerzo por una chica como yo. A uno lo golpeé con la vaina en la sien y lo dejé fuera de combate y el otro tuve q atravezarle el filo en una mano y en un hombro.
Aprobechando el KO, les robé el dinero que tenían, y una llave. La llave era de ua habitación bastante fea, pero donde tenían guardado más dinero.
Esa noche aprobeché bien ese dienro haciendo varias cosas: buscando un hotel y comiendo bien.
Al otro día me corté el pelo con un barbero (que no dejó de preguntarme porq tenía tantas magulladuras) y me compré un pasaje de tren. De ida.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Sat Jun 27, 2009 6:37 pm
Afuera
Me bajé en un pueblo campestre, pequeño pero pintoresco. Con el dinero me pagué una estadía en una pensión e insumos generales.
Iba a comenzar mi vida de 0 como una adulta precoz q solo sabía golpear mucho y bastante fuerte.
En este pueblo descubrí muchas cosas sobre mi misma. En susbosques encontre y definí muchos de los poderes q perfeccione luego.
Aprendí a volar con el moon flyer, y a sacara a voluntad el moon shield. Aprendí a moverme con agilidad con la katana y a controlar mejor el filo.
Diseñé y elaboré mis primeras ropas de combate, modificando mi uniforme del orfanato. Eran raras, ahora q lo pienso, demasiadas puntillas y volantes,
pero eran bonitas.
En ese pueblo lejano, también encontré mi primer trabajo, en una panadería. Fue extraño, pero me dio momentos de paz en los cuales pensar mi siguiente movimiento.
Todos los días nos llegaban noticias de la guerra enre las tropas de los Ishii y la Casta Militar Howsmorth, en el Norte. Así fue como decidí mi siguiente movimiento.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Wed Jul 01, 2009 11:16 am
Norte
La locomotora que atravezaba comunmente las montañas hacia el golfo de Hioshu, reducía su velocidad antes de llegar siquiera a una de las faldas.
Las tropas de Howsmorth irrumpieron en los camarotes y revisarona todos y sus pertenencias, incluyendome a mi, mi atado de cosas y a mi compañero de viaje, un señor muy correcto con un bigote muy extraño, el cual resultó ser falso como su identidad de "hombre de negocios". Nos apuntaron con sus mosquetes, que no lograron disparar, porq de un movimiento de la katana corté sus cañones. Aprovechando su estupefacción (a decir verdad yo tmb estaba sorprendida) huímos, saltamos del tren inmovil y nos internamos en la campiña.
El viaje al Norte siguió en una carreta q nos prestaron otros agentes de los Ishii apostados algunos kilòmetros más adelante. En el trayecto mi compañero de viaje se presentó como el capitán Jonathan Ureda y antes de decir más, ya estaba yo enrolada en el ejercito Ishiiano. Me lo había buscado.
La ciudad estaba rodeada de tropas enemigas, y los Ishii resistían desde su castillo fortificado, en las afueras. Se llegaba al castillo desde tuneles secretos y toda clase de atajos, y así fue como llegamos con Ureda sama ante la poderosa familia real del Norte.
Jonatahan fue cariñosamente recibido por la cabeza de los Ishii, Setsuna Mary Ishii , quien lo abarazó afectuosamente antes de pedirle mi nombre...y correr hacia donde yo estaba para darme un beso en la mejilla y decirme q era una pekeña y adorable soldadita.
No fue el momento más brillante de mi carrera, lo admito.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Thu Aug 20, 2009 10:37 am
Capitulo 8
La resistencia
a pesar de que fue mi primer lucha organizada, no tuve mucho protagonismo. Sin embargo, Ureda sama me enseñó a manejar mejor la katana. A pesar de lo había salvado del tren, todavía se mostraba un poco reacio, porq yo era una adolescente y no parecía muy fuerte. Pero dsps de unos entrenamientos, las cosas cambiaron y él se sintió mejor al enseñarme más y mejores tecnicas de combate.
Una noche nos llegó el informe de que las tropas enemigas venían en camino, así que en las almenas nos apostamos con mosketes, arcos y flechas. A pesar de bajar a la mayoría de los soldados desde ahí, ellos tenían catapultas, así q varios de los torreones se desmoronaron.
Fue una noche larga, en la que on granadas nos deshicimos de las catapultas y matamos varios hombres. Hubo muchas bajas y cuando el alba despuntaba yo yacía en un charco de sangre incapás de respirar ampliamente.
Ureda sama se sorprendió de que hubiera sobrevivido. Yo también lo estaba, porque no debería. Muchos hombre mas fuertes y mejor preparados que yo habían muerto y yo seguía allí, con más cicatrces y manchada de sangre, pero viva.
Al recuperarme completamente, le informe a Setsuna que me iba, que tenía cosas que hacery que terminar. Ella me dio las gracias por haber luchado a su lado y me dio un reloj de plaa q mas tarde aprendería ausar para algo más q saber la hora.
En el último barco de la tarde, partí nuevamente hacia el norte y me dije q nunca más volvería a ser parte de un ejercito.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Thu Aug 20, 2009 10:45 am
Las niñas
Al llegar al puerto de Chio ya habían parado las pesadillas del fuego y las catapultas. Me había obsesionado la idea de hacerme más fuerte y sentía q todo lo que me había enseñado Ureda Sama no era suficiente.
Sin embargo, me veía en un aprieto. No me quedaba mucho dinero, a pesar de que Setsuna me había pagado bastante, pero si kería emprender otro viaje, necesitaba trabajo. A pesar de las complicaciones, me puse diligentemente a buscar alguna profesión.
Al final del día no había encontrado nada y estaba tirada boca arriba , bajo un árbol en un plaza. Había comido alguna cosa ligera y ahora me preguntaba donde iba a pasar la noche. Todavía no tenía como costumbre dormir a la intemperie como luego lo haría tantas veces, así que todavía me resistía a la idea de no tener un techo bajo el cual yacer.
ASí q ahí estaba, vagamente tirada cuando escuché dos pares de pies , pekeños pies, acercandose a toda carrera hacia mi, al grito de "mira! una katana!" . Me incorporé en seguida para protejer mis pertenencias y una niña se avalanzó sobre mi, mientras la otra me sacaba mi arma. Yo estaba demasiado sorprendida como para reaccionar bien, así que me saqué a la pekeña como pude de encima y empecé a perseguir a la otra. La alcancé rapidamente y la agarré por la aparte de atrás de su vestid lleno de puntillas y volados. La levante en vilo, y le saqué la espada.
"niña mal educada! no debes hacer esta clase de cosas a las personas!" le grité y la nena, una chiquilla pelirroja con cara de vaga total me sacó la lengua y empezó a llorar. Yo no entendía bien esa reacciín, hasta q me di cuenta de q algo me estab haciendo sombra.
"Será mejor q deje a mi hija en el suelo, señorita" escuché una voz detrás mío. Aldarme vuelta lentamente vi un hombre enorme de traje marrón. Yo hice lo qme ordenó y la chiquilla fue corriendo detrás de su padre, donde ya la esperaba su hermana.
"Será mejor q venga conmigo, Señorita" dijo el hombro con tono glaciar y danome la espalda empezó a andar. Yo, sin ganas de desobedecer, le seguí rauda.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Fri Oct 09, 2009 12:04 pm
La gran casa
Bueno, yo estaba sentada frente a un gran escritorio antiguo y detrás de él este hombre enorme me miraba seriamente. Yo no sabía q cara poner y estaba realmente muy incomoda.
"La verdad es no creo haber hecho algo malo" le dije firmemente. Al tipo le brillaron los ojos. Yo me arrepentí al instante.
"No, usted no estubo mal. Probablemente yo lo estube al haberme casado con la mujer q me casé, pero amo a mis hijas. Creo q usted no me entiende"
y tenía razón porq había pasado yo de mi mirada de miedo a una de desconcierto terrible.
"Verá, la madre de mis hijas las conciente mucho y cuando yo impongo una orden, ella pasa por sobre mi autoridad. Las está malcriando y yo no quiero eso. Mientras sean jovenes, todavía puede cambiar. Y tal vez se pregunte por q le digo esto, pero la verdad es que cuando la vi poniendo limites... quiero q sea la institutriz de las niñas"
Yo todavía tenía cara de desconcierto, pero teniendo en cuenta de q estaba metida en una manción bastante grande y q hacía una hora no tenía trabajo... Acepté de inmediato.
Lo malo del trabajo era la ropa, totalmente. Tenía q usar un vestido muyextraño y negro y zapatos formales. Por suerte me dejaban tener los guantes. Mi "señora" como exigia q la llamara, era realmente una señora muy hueca que había tenido años mejores. Y mi patrón era un hombre cansado conciente de sus errores, perseguido por ellos, pero muy rico gtracias al comrcio de maderas. Y mis coolegas, los sirvientes, eran buena gente q siempre me dejaban comer con ellos.
Y las niñas me dieron dolores de cabeza desde el primer día. Yo no tnía mucho saber enciclopedico q impartirles, eso lo hacía su maestro, pero yo, empecé a utilizar lo que Ureda sama me había dado: diciplina militar.
Claro q no era una genreal, yo todavía recordaba (todavía recuerdo...) el orfanato y tenía conciencia de lo feo de la ausencia de calidez en las personas q nos cuidan, pero tmb tenía q ponerles limites. Encontré esa manera entrenandolas con espadas de madera, porque, no estba muy segura porque, les encantban las armas y tenían mucha energía.
Así las entrené por varios meses , hasta que una noche, cuando no soporté más estar ahí entro, y no porq no quisiera a las personas q me habían acogido, sino porque era un trotamundos y debía trotar...me puso mis viejas ropas y me fui.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Fri Oct 09, 2009 12:11 pm
Capitulo 11
porq eso q escribí ahora parece estupido?
porq lo parece, verdad? Supongo q esos meses , que no llegaron al año, fueron los más tranquilos que pasé desde q hubiera dejado el orfanato. Podía entrenar , la casa tenía una sala llena de distintas armas que las niñas habían crecido viendo y deseando usar, y que yo si me daba licencia de usar y sopesar.
También aprendí a cabalgar, aunque no podía costearme un caballo. Y ahorré mucho como para pagrme mis proximas aventuras sin muchos problemas. Siempre tuve como una máxima tener un mínimo de dinero, el suficiente como para comer y dormir bajo techo.
Aún siendo una guerrera ambulante, las comodidades te encienden el alma.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Posted: Tue Feb 02, 2010 3:10 pm
Iluminada
Una carreta me llevó muy amablemente a la otra punta de la comarca. El paso por el bosque era peligroso y mi katana y yo eramos una buena garantía. Al princpio dudaban de mi valía, pero luego de un encuentro con un grupo de vagabundos, los carreteros entendieron que yo era más de lo que parecía.
Así andando, bajo la luz de las lunas, llegamos a Chiuu Valley, un ancho valle q se extiende hasta un gran bosque. La ciudad q allí se erigía era muy bulliciosa, porque allí se conectaban varios caminos, era un buen puesto para refrescar los caballos en el camino hasta Kyoma, tenía una universidad y unas ruinas de un templo.
Al llegar a Chiuu Valley, di mi trabajo por hecho, cobré una mínima comisión y me adentré a explorar la ciudad.
Era enorme, brillante y olorosa. Gasté todo mi dinero en una buena comida y después me heché a dormir bajo un manzano aprovechando la hermosa noche. Con lo que yo no contaba era con el estricto control de la ciudad de los vagabundos. Corrí hasta escaparme de las fuerzas de la autoridad q quisieron reprenderme para confiscar tmb mi katana y terminé escondiendome en las ruinas del templo.
Cuando perdí a mis perseguidores exploré la amplia estructura. Como era un lugar turístico muchas entradas estaban cerradas, pero me las ingenié para entrar a una cámara espaciosa y bien ventilada a patadones.
Y allí pude dormir.
Cuando desperté estaba rodeada de flores blancas en un lugar muy extraño. Me rodeaban muchos monjes calvos q cantaban una extraña letanía con los ojos cerrados. Yo pegué un grito y heché mano a la katana, pero no desenvainé. Todos los monjes abrieron los ojos y gritaron "la Iluminada,la iluminada!" con alegría.
Y yo quice respuestas.
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Kiaori Moon Warrior Vice Captain
|
Posted: Tue Feb 02, 2010 3:30 pm
Muerta
Una vez que me senté en una mesa con mucha comida adelante y con dos monjes sonrientes delante de mi, comencé a comprender, por las cosas q contaban.
Al parecer, el culto del templo no había sido abandonado por completo. Perseguidos por reformistas políticos, la Orden de los Iluminados (originalísimos) se había refugiado en los bosques, pero todas las noches de doble luna llena, volvían al templo , a las cámaras selladas, por conductos y pasadizos secretos, invisibles para todo aquel no perteneciente a la orden.
Entonces me encontraron a mi durmiendo. Según ellos, era una señal divina, que una mujer estuviera placidamente dormida dentro del templo.
Y luego vino la parte bizarra.
Según los antiguos manuscritos, las mujeres eran sagradas, y más las jóvenes. Entonces, como describían las ritos, me tomaton, me amordazaron y me ataron. Según ellos forcejeé mucho, pero ya estaba maniatada así que no pude hacer mucho. Eso no lo recordaba, lo que me ponía aún más confusa.
Y luego, según ellos, me metieron en un altar y me sacrificaron a Tsukiumi , la diosa dela luna, cortandome el vientre con mi propia katana. Quién lo hubiera dicho, ahí estaba la cicatriz. Aún más aterrada, tomé a un monje de la sotana y lo estampé contra la mesa hasta que me dijo que al 3er día volví a abrir los ojos, completamente sana. Revolée al monje sobre la mesa y agarré al otro, que confirmó lo que dijo.
Como me dijeron después, con las narices sangrando, ahora la energía de la Tsukiumi habitaba en mi y en mi espada, y que si me sacrificaba por el bien del mundo, todo el mal desapaeceria.
Tuve que buscar a alguien q me dijera algo con un asomo de verdad, así q dejé atrás a esos monjes frikis y me senté con el sacerdote mayor.
Él me hizo una reverencia pero me explicó mejor q sucedía conmigo.
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Reply
